Vuelve a latir
en tu pecho de sembrador y fusil
el corazón de América latina,
aquel corazón que cual crisálida
permanecía dormido
en un capullo de auto defensa
ocultándose de aquellos
que por décadas gobernaron nuestros países,
ahora América latina despierta en ti
y se expande en tu coraje,
en tu audacia sensible
y dura como el acero,
sin miedo, indomable.
La esperanza asoma
en la mirada entristecida de Venezuela,
Y cuando solo quedaba el abismo o las trincheras
entonces llegaste tu
con el espíritu de Bolívar
y la sensibilidad de Juan Pablo Duarte
a darle cauce a la sed latina.
Muere el Che y naces tu,
lucha Fidel y luchas tu,
ruge Lula en brasil y siembras tu
y entonces despierta en tu alma
el espíritu de Martí
y se conjuga con la llama libertaria
de nosotros los humildes, los parias, los olvidados
y comienza a avivarse el fuego en nuestras fibras.
Usted señor presidente
ha venido cargado de estrellas
y de horizontes a darnos la esperanza
que creíamos perdida,
Yo me sumo a la trinchera de su lucha,
en la pólvora o en la filosofía,
para que sea exitoso el parto hacia una nueva era,
estaré en la retaguardia, en su defensa absoluta
y cuando llegue el día del descrédito,
porque lo acusaran de millones en Suiza,
en los bancos de Bahamas,
Y amigo del narcotráfico,
yo estaré ahí en su defensa,
porque un hombre como usted
querrán deshacerlo en la oposición o en el poder
porque usted es un peligro para los intereses
de los buitres venezolanos
y las hienas del capitalismo americano
y por eso, solamente por eso señor presidente
yo le extiendo mi mano solidaria de humilde poeta
hasta el fusil y la sangre...
VICTOR SUAREZ
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