lunes, 28 de junio de 2010

Al Doctor Marino Vinicio Castillo


La sociedad Dominicana esperó paciente la mano dura y esperanzadora de
un hombre que supiera y pudiera defender el patrimonio nacional,
alguien, quien extirpara las manos inescrupulosas que saquean los
bienes del pueblo, que aparte de la administración publica a aquellos
que se creen y se han creído dueños de la riqueza estatal y la han
utilizado en forma arbitraria, injusta e ilegal en su beneficio
personal.

En un país donde más del treinta por ciento del presupuesto nacional
se queda en manos de los que simulan ser servidores, desde el estado y
para el pueblo, es decir en manos de ministros, quienes su único
interés es enriquecerse. Un hombre como usted podría romper con la
cadena que nos ha traído atado por décadas al hambre y la miseria.

No es que sean ministros de hoy o de ayer son los mismos de siempre,
los que vienen al estado con la intención de resolver sus vidas de una
vez y por todas, desde un cargo que muchas veces han obtenido con
engaño a la humilde gente del pueblo, del pueblo si, ese que nunca ha
tenido quien lo defienda desde lo alto del poder.

El único compañero de esta población, ha sido el dolor del desamparo y
la complicidad de los que dirigen la justicia con los facinerosos,
ellos son los que les han infringido la estocada, la dolencia de no
poder desarrollarse, hombres y mujeres de este país, en el cual muchas
veces no nos sentimos representados y huimos hacia otras fronteras
buscando luminosos horizontes, los cuales tantas veces se convierten
en espejismo, todo por que un grupo de inhumanos le sustraen el
derecho a vivir con dignidad.

Yo confío en usted, distinguido maestro, en su justicia, en su honor,
en su pulcritud, en su entereza, en su cristiandad y en su bondad. Que
no enfrentemos tan sólo a los corruptos del otro lado de la trinchera,
si no también a aquellos que en nuestra propia escuadra se quieran
pasar de listos y mancillen la línea del honor y la excelencia con sus
actos inescrupulosos. Quiero ver la excelencia en ejecución a su
derredor, la excelsitud, la cual usted con dignidad nos ha enseñado.

No quiero sentirme decepcionado cuando pasen los años y su función
haya terminado y no se haya sentado un precedente en la lucha contra
los desfalcadores. Que nuestra disputa no sea contra la corrupción y
nada más, contra una definición de una palabra, sino, contra el
corrupto, que se vuelva personal si es posible, por que el tiempo, del
paño tibio a los casos de sustracciones también hay que extirparlos de
la justicia.

En su mano descansa mi anhelo, en su auxilio también descansa la
esperanza de miles de dominicanos que los siguen a usted, por que
confiamos en su rectitud y en su indomable historia de respeto e
intolerancia antes los actos deshonestos.
Por Víctor Suárez

Aquí nada cambia


Cuando a principio de la década de los setenta vine a la capital, con mi escarcela cargado de sueños, a mitad del bachillerato, una guitarra a cuesta como mi única arma y con apena diez y seis años de edad, fui al refugio de los que queríamos cambiarle la cara al mundo, o, por lo menos al país.

Esto era el movimiento cultural donde convergían todas la fuentes culturales del país, claro con las infiltraciones políticas de todos las corrientes de entones.

Entonces asocludisna era la cabeza del movimiento cultural, debatíamos desde la poesía desde Machado a Pedro Mir.

La canción de víctor jara, Serrat, y Silvio el más cantado entre todos.

Comenzaban entonces las discusiones férreas, debatiendo si la cultura debía ser popular o nacional, cosa casi nunca entendí, porque mi conciencia me decía que eso no desembocaría a ninguna parte y el tiempo me ha dado la razón, la discusión jamás debió ser esa.

Fui miembro del club hermanos delignes en el ensanche Espaillat, por consiguiente miembro del colectivo músico cultural del club.



Estuvimos en todos y cada uno de los clubes del país tratando de hacer conciencia política y cultural.



Luego dentro de la sanguinaria represión de los doce años del Balaguerato, gente que se creyó dueños absolutos del país

Cayó Orlando Martínez, un muchacho del pueblo, un hombre de conciencia. Ese acontecimiento me marcó, me hizo cambiar y me uní al colectivo musical del partido comunista dominicano, en el cual militaba Orlando, aunque nunca fui miembro inscrito en el partido, quería hacer mis aportes desde la canción, que era el único canal por cual podía hacer mi denuncia de las necesidades en que vivía igual que hoy este pueblo.



El colectivo siempre recibía la orientación cultural, en gran parte, por la hoy importante miembro del partido de la liberación dominicana Minu Mirabal y Narciso Isa Conde.

Cuando Minu se fue al partido de la liberación dominicana, el partido comunista dominicano estaba pasando por momentos difíciles políticamente hablando.

Otra vez en la izquierda comenzaban las discusiones estériles y el divisionismo, que si este es revisionista, que si aquel, maoísta, que si marxista, que castrista y un sin numero más de calificativos que sólo nos llevaron a divisiones y el país a la deriva.

Demasiado hambre cerebral y espiritual para emularnos por la patria, demasiado miedo a la muerte, por eso cuando Caamaño desembarcó lo dejamos solo, por miedo, y por lo divisionistas que somos los dominicanos, sensibles a la criticas, intolerantes y siempre nos creemos capaces, para formar nuestra propia organización para no comerle mierda a nadie y entonces con actitudes como estas, siempre hemos sido cada ves más débiles en todo lo que como grupo nos proponemos hacer.



Y esto pasa en todos los grupos que formamos, dividirnos, desde un simple combo, hasta un partido político que se supone, debe ser sagrado, por que, el germen que trae un partido, es el de servirle a la patria, pero los dirigentes mal interpretan esto, y primero están sus fantasías personales y ellos están por encima de las misma instituciones que ellos mismos forman.



En los ochenta pasé a ser miembro del salvador allende en la parte norte de la capital, y era un orgullo ser circulista, vender el periódico, ponernos la boina, ir a los mítines al play con nuestras banderas moradas y escuchar allí con nuestro niños aun pequeños los extensos discursos, de los miembros del comité central del partido y terminar con la grandiosa e histórica frase de servir al partido para servir al pueblo.



Y otra vez descuidé la familia por que había que servirle al partido, guitarra al hombro de pueblo en pueblo a nombre del partido de la liberación dominicana.

Y hoy los que nunca vi son los que beben el sagrado maná, que ofrece el poder.

Los días eran románticos, políticamente hablando, se luchaba sin esperar nada a cambio.



Por estas razones sentimentales, vinieron otros con el dinero como armas, y secuestraron el partido, la lucha revolucionaria, echaron los ideales a un lado y se instalaron en el poder para hacerse millonarios, para que ese movimiento revolucionario volviera a cero.

Hoy sentimos que nuestra generación fracasó, total y absolutamente, los jóvenes compañeros, fueron vilmente asesinados, todo el adelanto político, cultural, revolucionario que pudimos haber logrado, fue pisoteado y hoy años después sólo nos queda el resentimiento de ver a los que siempre fueron los enemigos, los que con sus látigos laceraron nuestras espaldas, chupándose el néctar de nuestra lucha, como si ellos estuvieron en la parte del peligro absoluto en el que vivimos nosotros.

Los mismos que combatimos, son a quienes seguimos amamantando, mientras los verdaderos luchadores, los que se expusieron a la muerte, han de hacer huelgas para que le paguen una miserable pensión.

Aun soy de los que cree, que la lucha deben ser menos hablar y más hacer, porque al fin y al acabo el tiempo pasa y la muerte esta de nuestro lado, porque este afán perentorio de querer servirle a los demás nos hace llevar una vida miserable.

POR Victor Suarez

Y después de la cumbre… ¿Qué?


Para no decir que estoy en desacuerdo con la cumbre, lo cual creo que toda mesa de conversación y negociación es saludable, yo hago mi propuesta, mi única propuesta: Que se rebaje un cuarenta por ciento a los alquileres de las viviendas y locales de negocios en todo el territorio Nacional. En vista de que todo aquel que tiene una casa para alquilar es por que ya tiene otra, u otras, esto no les afectará, en cambio muchas familias dominicanas se beneficiarían de esto y podrían llevar un poco más de dinero a su ya tan castigada economía. Ésta es mi propuesta para la cumbre, pero les juro queridos lectores que esto no será, pues, este es un hueso duro de roer y hay intereses ahí que el gobierno no se atreve a tocar, aunque esto beneficie a las grandes mayorías. Pero, ese será un elegante escenario para un magnifico figureo en radio y televisión, y estar entretenido unos días, yo mientras tanto me voy a sembrar para el campo los víveres que se que me faltarán en el transcurso del año.

Las cumbres son iguales a las comisiones, nunca resuelven nada, esas cosas se mueren en el tiempo, y sépalo usted que después de la cumbre, seguirán las mismas discusiones estériles, la misma carencia de mi pueblo, las mismas noches oscuras, los mismos periodistas, papagayos,

Después de la cumbre seguirán los mismos asesinatos de los jóvenes en los barrios, los mismos dioses de la republica, en los cuarteles policiales, decidiendo quien vive y quien muere, la misma incapacidad para enfrentarse a ladronzuelos, y es mejor quitarle la vida que estar cogiendo lucha.

Después de la cumbre seguirá la crisis, porque esta crisis es de los pobres, de los que no sacan dinero para Miami, ante la complicidad de las autoridades, de los que no tienen apartamentos en Madrid, para vacacional, de los que no tienen villas en casa de campo. Esta crisis es de los asalariados, aquellos que a mitad de mes se le termina el presupuesto, y no tienen que darles a los niños para comer, no tienen para pagar las cuentas.

Después de la cumbre la educación seguirá siendo la misma deficiente educación de antes y después, la culpable educación de que no seamos capaces de sentarnos a negociar, la inútil educación que no nos permite ver el amor y el respeto a la vida de los demás, esa falta de educación que nos hace egoístas y faltos de humanidad.

La sociedad dominicana seguirá siendo la misma con todas sus necesidades, las que la han acompañado desde hace quinientos años, por que es de todo bien sabido que los viven en lujosas mansiones, almuerzan en lujosos restaurantes, y visten de las famosas tiendas de la 5ta avenida de nueva York, no les importa el hambre de los desposeídos.

Los días grises de mi pueblo no terminan y no terminarán, mientras la cúpula de la sociedad acostumbrada al lujo y a la riqueza, sean los que dirijan los diálogos explayados sobre la mesa.

Después de la cumbre todo será igual y como la crisis se agudiza, creo que será peor.

Es muy difícil que bajo los cánones de las conversaciones y de la Paz, las sociedades sufran transformaciones que favorezcan a los de abajo. Los poderosos nunca dan, nunca ceden, hasta donde se ponga en peligro su buena vida, ni sus intereses, por eso en el curso de la historia hemos visto que para que los menesterosos obtengan alguna merced, ha habido que arrebatarle con violencia lo poco que ellos han dejado después de sus grandes malversaciones durante largos años.

Víctor Suárez

Hambre de pan y horizonte



Mi pueblo tiene sed y tiene hambre,

el ocaso estrangula la perspectiva,

indigentes como enjambre,

ante el mundo es diatriba.



Me acuesto sin energía eléctrica, cansado de enfrentar el día, un día duro y sin progreso.

Me levanto temprano igual fatigado y otra vez no hay agua, pasa de largo el vendutero, plataneeero, no hay un peso en la casa para el desayuno, así se irá el día, en las gracias de Dios, me lanzo a las calles sin trincheras, pero,

es como si fuera a una guerra con la carencia infernal que llevo en los bolsillos.

Medio baño a mi cuerpo y una tasa de café en el estomago.

No tengo completo el pasaje, le digo al cobrador de la voladora, me deja subir, después de unos cuantos insultos, de allá para acá se lo pediré a alguien, o vengo a pie, para no aguantarle vainas a este tipo.

Busco trabajo en la fábrica, en el ayuntamiento, en las casas en cualquier sitio y nada. Que vaina, me atormenta mi casa, no les dejé nada a esos muchachos para comer, donde acudo, a quien le ruego mi hambre y mi desdicha, nadie lo entiende, quien entiende que mi carencia es la misma de tantos otros. ¿Y el plan social de la presidencia? No, eso, nada más funciona en navidad, al menos eso creo, además uno ni sabe donde queda esa jodienda, está tan oculto, que de social no tiene nada. Ya son las doce del medio día y el café en mi estomago se ha convertido en ácido amargo y me duele. Me duele tanto como ver a tantos igual que yo, en esta situación de desesperanza, de miseria y de hambre.

Si yo fuera presidente, sin importarme nada, haría primero lo que es básico para la vida de un ser humano, le garantizaría, su alimentación, mi gente, por lo menos los servicios básicos que dignifiquen la vida del hombre como ser pasajero por este planeta. Comida, salud, educación, trabajo y vivienda, no hay que darle esto a la gente, pero, hay que ponerle todas las facilidades para que esto ocurra en la vida de cada familia.

Lo demás lo dejo para después, cuando se pueda.

No es justo ver morir a un hombre herido por el hambre, malogrado de falsas medicinas, envuelto en una carencia interminable, no es justo vivir en un barrio donde el agua llega dos veces por semanas, como si el trasero la gente se lo lavara sólo unas cuantas veces al mes, no es justo vivir en un lugar donde las calles son lagunas intransitables de aguas negras, donde la falta de oportunidad hace delinquir a los adolescentes.

El hambre tiene cara de hereje, el hambre nos hace tomar acciones que nos llevan a buscar el pan, aunque esto nos transporte a la pronta muerte.

Hoy igual que ayer, los ojos de mi gente en este auto bus se ven tristes como los míos, las caras, ajadas y los sueños truncos, hoy igual que ayer el barrio, esta herido de muerte en el costado derecho, y lleva en su cuerpo las mismas heridas de Jesús, las de la incomprensión, la de la codicia, la herida de la dejadez y el abandono.

El pueblo sigue poniendo las mejillas, neciamente sumiso, mientras los verdugos del poder se enriquecen y con su indolencia, me golpean y golpean a mi pueblo y a mi gente, de forma tan cruel y tan severa, que no nos queda más camino que el de la violencia, el ojo por ojo y diente por diente.

Por Víctor Suárez

Por la defensa de mi pueblo


Una necia insistencia que quieren usar los retrasados políticos,
conformistas, de este desastre llamado sistema que fomenta estos
estados de miseria, es repetir como papagayos que los que escribimos
para defender a este pueblo de su hambre y su indigencia perpetuada
por el capitalismo, acomodados, permisibles de todos los males que nos
aquejan es que, estamos anquilosados en los años sesenta, pero quiero
decirles a esos avanzadísimos pensadores que el hambre no pasa de
actualidad, que el hambre es la misma de ayer, que la falta de
medicinas en los hospitales es la misma de ayer, que esta educación
atrasada, es la misma de ayer, que la corrupción y el enriquecimiento
de grupitos, es lo mismo de ayer, que estos partidos, todos, los que
están en la lucha por dividirse el botín del estado, el botín del
pueblo, son los mismos de ayer con diferentes nombres, inconscientes
retrasados pescadores de fortunas y posición, para verse como
triunfadores ante los que no han tenido la oportunidad de infiltrarse
en el mal llamado progreso del individualismo.
Si el pensamiento ha avanzado políticamente hablando, ¿porque no ha
avanzado el bienestar para las grandes masas?
No soy pele deísta, ni reformista, ni peredeista, soy un hombre de
pueblo, con la sensibilidad humana de ver una población que perece en
la lucha diaria sólo por subsistir, mientras los patrañeros,
mentirosos, vives bien, no les remuerde la conciencia sus sed de
riqueza y traición a este pueblo que cada cuatro años pone su
esperanza en ellos.
Sus artimañas ya todos las podemos descubrir con tan solo una mirada,
ya no nos pasan desapercibidas, esos son los mismos de siempre: los
que se opondrán, si los campesinos tienen la tierra para trabajarla,
los que se opondrán, si los pobres tienen techo humano para vivir, los
que se opondrán, si los padres de familia tienen empleos justos. Esos
son los que se opondrán si esa fuerza militar corrupta es erradicada y
sustituida por hombres de conciencia, que sepan trabajar para la gente
y con la gente, esos son los que gritaran de rabia si les quitan la
mamila de la que han chupado por décadas, esos llorones son los que
enfrentarían a un gobierno que no permitiera el enriquecimiento
ilícito, que colectivice las riquezas de esta tierra.
Que llore quien quiera llorar, aquí la verdad es que un grupo se
beneficia de todo, otros de nada, ese grupito de malandrines, nos
joden cada día con sus defensas de su propio bienestar y sus intereses
mal sanos.
Esos son los que celebran en grande sus navidades y con orquestas
caras y grandes mesas celebran el cumpleaños de las amantes, todo a
costilla de los bienes de mi pueblo, mientras la triste gente los mira
con los ojos largos desde los suburbios muriendo, del hambre y la
desesperación, de pena, desde tiempo de Balaguer les envían una
fundita con la miseria adentro.
Por tales razones muchos abandonan el país hacia otras tierras en
busca de lo que aquí las hienas les han quitado.
Que dejen los llorones ciegos, enanos políticos, vividores insaciables
de los bienes de la nación, de querer hacerle creer a este pueblo que
un hombre tiene la culpa de lo que aquí pasa, ninguno en particular es
el culpable y en conjunto todos lo son, ellos son marionetas, que yo
jamás seria, cuando de defender a mi tierra se trate.

No quiero llorones a mi lado defendiendo un miserable sueldo,
defendiendo gobiernos inescrupulosos, defendiendo sistema de política
permisibles y propagadores de la corrupción en todas sus magnitudes,
quiero hombres concientes que puedan mirar más allá de su sombra, que
comprendan que la vida colectiva, es un asunto de todos, que la vida
en comunidad, es asunto de todos, que el bien colectivo, es realidad
divina, quiero hombres que quieran vivir el sacrificio de no tener
nada, de no desear nada, de no necesitar nada, y entregarse
completo,todo por el bien de los demás,
que eso de un grupo vivir bien y otros muriendo en la inmundicia es
diabólico, ellos son los muertos de hambre que creen que acumulando
grandes cantidades de comidas, ganados, tierra y dinero van a ganarse
la vida eterna, mientras los pobres de este país tienen las neveras
solamente con un jarrón de agua fría.
Después de la dictadura los gobiernos que hemos tenido en este sistema
de miseria han hundido cada vez más a esta tierra en la desventura.
Quiero decirles a los llorones que: Hipólito, Leonel, Miguel, Amable y
todos esos negociantes de la política, instrumento del capitalismo,
águilas rapaces, fomentadores de miseria, no son más que fichas de un
mismo domino, ni uno ni el otro, para que no confundan mi horizonte
con respecto a la defensa de este pueblo que ya no aguanta un día más,
mis deseo para los fines están muy por arriba de sus entendimiento.

Víctor Suárez

Hasta cuando pueblo mio


Muchas veces quisiera mejor escribir de arte, de poesía, de cultura,
o, cualquiera otra cosa menos de la diaria politiquería, por que los
medios desde las seis de la mañana están llenos de basura enajenante
de politiquería barata muchas veces pagadas para perfilar un orden
determinado y por que se que eso de política al estilo criollo no le
suma nada a mi crecimiento como individuo que quiere alcanzar la
difícil meta de tener un pueblo viviendo en la calidad de vida que
humanamente debiera.
La política en mi pueblo es un asunto personal entre mis
conciudadanos, aun no llegamos al debate de las ideas. Aun muchos de
los ojos de mi pueblo no saben ver, aun muchos de lo oídos de mi gente
no saben escuchar, aun muchas de las bocas de mi gente no saben hablar
y aun muchas de las mentes de mi gente no sabe distinguir la verdad de
la mentira y se dejan engañar, se dejan embaucar de discursos
mentirosos de políticos del sistema que no nos llevará a más que, a
una fundita de cuatro libras de alimentos de mala calidad.
Esa no es la política de la cual quisiera hablar para mi pueblo.
Para mi pueblo que ha vivido en el oscurantismo por décadas.
Quiero ver a este pueblo estudiando entusiasmado, quiero ver mi
pueblo, trabajando fervoroso, quiero ver este pueblo culturizándose
fanáticamente, quiero verlos a todos reunido en familia, sin tener que
abandonarse el uno al otro por el hecho de buscar mejor vida, quiero
verlos a todos, construyendo edificando un futuro fuerte, con sus
necesidades perentorias cubiertas, para que jamás vuelvan pelafustanes
a engañar la gente ofreciéndoles empleos de mala muerte y promesas
incumplidas, mientras se lo roban todo por la puerta trasera y por la
del frente hay un nigromante inventándole actos de prestidigitación a
este pueblo ingenuo que no acaba de despertar.
Y mi gente les sigue creyendo que son señores interesados en cambiar
de situación el país, que años tras años vive en la miseria absoluta,
y años tras año repite en un sistema absolutamente obsoleto, como un
estudiante retrazado el mismo grado.
Desde este estilo de gobernar a los dominicanos, solamente
encontraremos ignorancias cada diez años, hambre, analfabetismo,
corrupción, dolor, y un grupito hegemónicos ejerciendo su poder de
mentiras sobre la mayoría, sobre la cual ellos educan para que le
sirvan y no para servirle a la nación.

Por Víctor Suárez

La capacidad de servir



La capacidad de servicio en un ser humano es un don divino que lo
catapulta al crecimiento místico, las personas que poseen ese divino
don, son diferente a la muchedumbre, son despreocupados con ellos
mismos, pero muy interesados en el bienestar de los demás.
Son seres de almas grandes, que no conocen de las mezquindades de la
acumulación, de la vida jactanciosa, ni de riquezas como lujo
enajenante, ellos quieren ver a todos bien, viviendo una vida digna.
El que da servicios desinteresado, es feliz con el enaltecedor hecho
de hacer feliz a otro, no se ata a las cosas materiales pensando que
en algún momento le puede faltar, no necesita nada, el suministro
divino le provee de cuanto necesita, siempre tiene la mano llena, por
que sabe que siempre hay alguien que necesita.
No es cualquiera quien se entrega al bien común, la mayoría, primero
piensan en si mismos, y luego de su seguridad dan de lo que le sobra,
eso no es servir. Esos son seres sin fe en el poder infinito del
altísimo, sin conocimiento de nada, y creen que la vida es solo aquí
en la tierra, y el atraso espiritual es tanto, que hay personas que
creen que la vida de un ser humano en la tierra dura milenios,
ignorando que la muerte puede tocar su puerta en el próximo segundo.
Pero el egoísmo, la maldad, el oscurantismo ilusorio, hacen que cada
día más los seres humanos se alejen del amor y la acción de servir, el
cual es el acto más directo que tenemos los humanos para crecer como
almas celestiales y acercarnos a DIOS.

Cuando un ser está a ese nivel de evolución, de no importarle su
bienestar personal, si no, el bienestar del conglomerado en el
planeta, o en la comunidad donde habita, este ser humano a entrado en
la categoría de ángel, el cual se ha salido de la situaciones
materiales, de las diarias querellas, del magias del poder
insustancial que da la posesión. A estas personas la propaganda
consumista no le tocan, el deseo por obtener grandes cosas materiales
ya no lo posee, y sus almas se vuelcan hacia el servicio a los
desposeídos, están claro que hay cosas más grandes, más hermosas, más
sublimes, más espirituales, que llevan al individuo a vivir el éxtasis
de lo excelso.

Víctor Suárez

A pedacitos


Regreso de un viaje hecho alrededor de la isla y mi alma se congela en
el frío del sufrimiento, la desesperanza y la compasión por un pueblo
que se muere de hambre, y la falta de todo, cuanto nos falta para que
nuestra gente no sufra más el abandono.
Cuanta tristeza en el rostro de la gente de estos pueblos de Dios,
donde lo único que tienen es la mesa de domino, para olvidarse un poco
de las carencias en que viven sumidos cual si fuera un mal eterno.
El campesino sigue sin la tierra para su sustento, sigue con el
machete sin filo porque ya no tiene que cortar entre los matorrales.
Al frente de su casucha un soberano terrateniente, tiene miles de
tareas baldías, mientras el paisano muere de hambre.
En mi recorrido vi niñas pidiendo bolas en las carreteras solitarias
hacia la escuela, exponiéndose al estupro de forasteros, vi niños
caminar descalzos con medio cuaderno hacia la escuela, los ríos
secándose por la deforestación en sus márgenes y desde su interior les
extraen la esencia.

Vi la isla, la parte dominicana llena de Haitianos como nunca antes
había visto en busca de trabajo, que los dominicanos no tienen, me
encontré con prostitutas que ofrecían su trabajo, por cien pesos, o si
no que le diera algo para llevarles a los hijos a la casa.
Cada pueblo lo mismo, ni más ni menos, hambre, miseria, desesperanza, tristeza.

A lo lejos, bellísimos paisajes paradisíacos entre montañas
solitarias, pero ahí frente a mi la angustia del desamparo, del olvido
de las autoridades. Eso si las fotos de políticos y las vallas súper
caras no faltaron en todo mi recorrido, anunciándose como los Mesías
salvadores del bienestar de la gente.
Mi pesar es inmenso, y doloroso, la gente aun cree que alguien le
solucionara sus problemas de vida, yo se que así no será, porque el
sistema establecido no le importa el sufrimiento del la mayoría, cada
quien quiere resolver sus propios problemas, sin importarle quien
muera en el intento, en esos poblados los políticos son caciques, que
mitigan en algunas cosas algunas necesidades de la gente, pero andan
en vehículos caros y lujosos ante la mirada entristecida de los
moradores.
Mi país es un país de pobre gente de conciencia, pero no es un país de
pobreza material, sólo que un pequeño grupo, maneja los recursos del
estado a su antojo, como si fuera propiedad privada. Esos viven en la
riqueza total y otros en la más infeliz de la pobreza.
Por eso digo que este país se esta cayendo a pedacitos, ni siquiera a
pedazos, la gente no tiene poder adquisitivo, la gran mayoría no
tiene empleos, todo caro extremadamente caro, los apagones ya se
vuelven legendarios en esas regiones lejos de la capital, el agua
contaminada, los combustibles inalcanzables pero hay un grupo que para
no citar su eslogan, diré, que hay un grupo dominante que dice que
aquí todo esta bien, yo diré que ellos están bien, por que este pueblo
se esta cayendo a pedacitos.

Víctor Suárez

Entrevista a Victor Suarez Realizada por Maria Helena Núñez de teleantillas (PROGRAMA SER HUMANO)


Hoy tenemos con nosotros al cantautor Victor Suarez, cantante, abogado y poeta quien sostiene la teoría de que cuando se vive con poco se es más feliz. esta promocionando un CD que lleva por titulo el amor es Jesús, este CD llegó a mi mano a través de Bruny mi amiga y yo quise compartirlo con todos ustedes por la energía positiva que en este disco encontré ,
Pero antes de hablar del disco y que nos cante por lo menos una canción, háblame de esa teoría de aprender a vivir con poco:
Buenas noches Maria Helena y a todo el publico televidente, gracias por invitarme a tu programa.
Pues desde mi punto de vista es m'as feliz quien menos cosas desea, y ya lo han dicho los filósofos desde la antigüedad; el deseo desmesurado por adquirir grandes cosas y riquezas, trae amargura, dolor y muchas veces la muerte a destiempo, la historia esta llena de esos hombres que murieron y mueren aun hoy por esa búsqueda enfermiza de riqueza, al capone, pablo escobar, dillinger. En nuestro país hemos visto de todos los estamentos de la sociedad caer en las cárceles por que no soportan la tentación de obtener dinero fácil, o mejor dicho que se ve fácil, porque es gente que quiere vivir en el lujo no importa como obtienen el dinero. Yo prefrió vivir con lo necesario cumplido, no necesito mucho para vivir, no pierdo mi paz en la lucha por alcanzar éxito económico, solamente quiero vivir en paz y en armonía con la naturaleza y con la sociedad, sigo sus reglas, respeto sus leyes, esto no quiere decir que la gente no trabaje, no luche, por mejorar sus condiciones y vivir de forma humana, no, lo que quiero decir es que el riesgo por obtener dinero de forma mal habida es tan alto, que trae como consecuencia, complicaciones irreversibles para la vida de esas personas y sus familiares.

Quieres decir que el dinero es malo desde tu punto de vista, víctor?
No, no es que el dinero es malo, si es bien ganado es lo mejor, si eres capas de vivir con el esfuerzo de tu trabajo y tu moral en alto, el dinero que obtenga será el suficiente para vivir tranquilo, los mejores años de mi vida fueron aquellos que viví en el campo, donde nací y crecí, no eché de menos el dinero, la riqueza, ni el lujo, simplemente era un ser humano feliz, las ciudades, transforman, su brillo su lujo, cambian la perspectiva de la gente y comienza la competencia por tener más y más.

Quiero decirte que en el mundo de la música y las artes, aunque es un mundo hermoso, es fácil caer en el lodo y ensuciarse si uno no sabe decir no, a las muchas propuestas que te hacen, yo he aprendido a decir no y por eso he vivido mi vida limpio sin que nadie me pueda señalar por haber caído en cosas oscuras y no gratas para la sociedad.
El artista tiene una conexión con lo divino y el que es artista por que nació artista difícil mente cae en esa lucha de riquezas, el dinero no es de interés para esos seres, por que nosotros somos felices con alegria que le podamos dar a los demas, felices con pequeñas cosas, pero con el corazón alegre

Pudiste hacer un CD de merengue o de esos ritmos que andan por ahí,
Porque un CD de canciones a Jesús?

Ya lo dijo Jesús dale al cesar lo que es del cesar y a Dios lo que es de Dios.
Entré al estudio y no sabia en verdad que iba a gravar de tantos tema que teníamos, si merengue, salsa, bachata o balada, así que cante la gran invocación que es una oración que hacemos en el templo antes de comenzar cualquier actividad en el día y a la cual yo le puse música el ingeniero de sonido la gravo y me dijo que era una canción muy linda y la mezclo sin yo pedirle que lo hiciera,

Me la puso en un CD Y me la entrego` ese día no hicimos nada mas,
Yo le regalé el tema a mi iglesia y la canción le gusto a las feligreses, así que la gente comenzó a buscarla y no existía un CD, pues hubo que hacer canciones que fueran por esa línea, o sea a Jesús y así nació el CD que aquí esta calientito apenas dos semana que salio del estudio.
Donde la gente puede encontrar el disco?
En la Máx. Henríquez Ureña 25 en el naco es allí donde esta el templo, es exclusivo de la librería del templo.
Les exhorto a todos que lo busquen para esos momentos difíciles por que es un disco bien refrescante.

Bueno pues gracias Victor por estar con nosotros
Y vamos a despedirte cantando la canción LA GRAN INVOCACION ,
Gracias a ti Maria Helena.

MI PAÍS


Mi país: eres un niño triste al borde del abismo, inocente e indefenso, con deseos de crecer, mas tú, lo ignoras todo, desconoces que aquellos que te escudaban y con sus vidas te defendieron de las manos de verdugos, ya no existen, que hoy esta siendo cuidado por hienas, que aunque no llevan sangre en el hocico, llevan sed de riqueza y poder en sus vientres, llevan en sus venas el génesis de la indolencia, te hacen creer que están interesados en que tu, mi querido país crezca sano, crezca fuerte, crezca hermoso, pero sólo les interesa tu enorme riqueza y la usan, la despilfarran, se la sustraen y se pelean entre si, dizque por tú defensa, es decir, por defender sus intereses y tu crees niño ingenuo que te quieren, que te aman y yo que miro desde el otro lado del abismo, se que no les importas como crezcas, si encorvado o erguido, si sano o enfermo, sólo quieren cebarse de tu sabia dulce y cristalina cual divino néctar que chupan por cuatro años y se nutren para siempre Yo los he visto hablar en tu nombre y te defienden y te exaltan y a veces me confunden de tal modo que hasta me enternecen y hasta me confunden y hasta llego a creer que de verdad te quieren.

Y tu pueblo mío sigue de rodillas, perdiendo la risa y a oscuralo demás lo decide la luna al traste dolido de la ira.No se detiene la culpa en el recodo, ni al culpable se convoca en su desvío, el encono se acelera sobre el rostro de la tenue mañana silente de frío.Como se detiene la culpa y al culpablesi jueces y partes son del juicio.

Y el presidente: en una burbuja de aire que no sabe a donde vay como no sabe donde ir, miente, se ve falso su discurso trivial. Mi pueblo quiere escuchar que le hablen de como salir de su hambre, quiere que le hablen de sus escuelas, de sus hospitales, de trabajo, de su agricultura, de su bienestar, mi pueblo no entiende de economía, mi pueblo quiere trabajo, mi pueblo quiere sentir en su mano el poder de compra, mi pueblo quiere ser feliz, a mi pueblo no le importan los viajes, ni las reuniones ejecutivas, ni los contratos diplomáticos, mi pueblo quiere soluciones para el día a día, mi pueblo quiere el pan sobre la mesa, cada día sin que esto sea una frustración cada noche, pero desde el poder tratan de envilecerlo y entonces no se pone el solen el imperio de mentiras negras que vagando va por la ciudaddormida, el pueblo se alimenta de sofisma, la libertad es una palabraconstruida y aún la protección anhelada, el corazón de la patria late iracundo igual que yoen esta tarde fria y gris que hace emanar el grito; que alguien cante una estrofa con versos de martillos, que alguien blasfeme un grito, que alguien pise fuerte el suelo a ritmo acelerado de furia, que se levante el vuelo del pueblo, que tenemos incompleta el alma, que hoy el alma a pleno sol se congela de latitud a latitud y la libertad sigue siendo una palabra, la protección sigue siendo una palabra.
Si yo fuera presidente auque sea por un día:te voy a decir que haría con mi pueblo y con mi gente,pues de manera conciente sólo un decreto daría.Que no falte la comida nunca jamás en la mesa,leche para los niños, tierra para el campesino,salud y educación en mi decreto estaríay así se que vivirían felices de corazóny entonces esta canción, sentido ya no tendría, pero mientras falte esto a la gente de mi puebloquedarme callado no puedo, canto lucho y protesto.Fíjate como anda el nuevo diputado, con nueva corbata y traje caro, ya la plata le ha cambiado, no tiene tiempo para la gente,muchas reuniones y nuevos cursos.Ayer lo vi en televisión, levantaba la mano en el congreso,ese es su nuevo trabajo, se ve bonito y en condiciones,nosotros seguimos abajo y mire usted esos tipejos como nos cogen de pendéjos. Rojo blanco y morao los tres, gobiernos han sido y más pobres hemos vivido los que por ellos hemos votado, del país nada han cambiado, para que creer en ellos, si nada más usan el pueblo como vaquita de ordeño, otra vez se oye su ruego pidiendo el voto del pueblo.

pero un día mi país concentrara muchedumbre y encenderá la lumbre contra la aristocracia infeliz, se izará con el trabuco, tras la trinchera y el acecho, a reclamar el derecho que los falsos le han quitado, a reclamar lo que he nuestro, vamos mi pueblo valiente.


ya se curaron la herida, ya se pueden ir mañana,Ya tienen en sus canana para vivir toda su vida, han manejado sin bridas las cosas de el estado, ya tienen llenas las manos, de los vienen de mi gente, creen que son inteligentes, algún día les cobramos.


esa es gente sensible de cualquier cosas se ofende si una persona del pueblo toca sus fibras sufrblesi, de una vez hasta el presidente sale desvalorando, igual salen funcionarios queriendo morder la gente. En este país varado, sin gasolina, sin agua, sin luz,sin esperanza, hay que ser un tarado para tragarse ese dardo de que es palante que vamos, pero si estamos reculando,todo el mundo se da cuenta, sólo ellos están de fiesta y el pueblo sin un centavo, que es palante que vamos dice airoso el presidentepero el pueblo está conciente que es para ningún lado, ya ellos habían estado y lo mismo le paso, el carro nunca arrancó y por eso lo sacaron, así que ya van tres años y su coche sigue parado.
Robar me dijo Remigio en este país da poder,aquel que sabe coger, aquí adquiere prestigio, no hay condena ni castigo para los defalcadores, por tal las instituciones de rateros están llenas, del pueblo no sienten penas, sólo importa sus millones.



Victor Suarez

HAITI EN LAS CALLES DE SANTO DOMINGO



La historia entre éstas dos naciones
ha sido y será siempre
la del cuento de nunca acabarse,
y en su evolución aquí ha habido de todo:
desde la más humilde de las amistades,
hasta la más cruel de las masacres.
Hoy día estamos ante una invasión pacifica
del pueblo haitiano hacia la Republica Dominica.
Digo que es una invasión pacifica,
porque como siempre es una lucha por la supervivencia.
Todos somos responsablesde lo que acontece en este país
con respecto a la migración Haitiana,
donde quiera que alguien necesita manode obra barata,
siempre se escucha un concejero decir búscate un haitiano,
por eso hoy día están diseminados en todo el territorio nacional,
porque hay fuente de trabajo en abundancia para ellos:
El servicio domestico, el sereno, los pega blockes, en la agricultura,
en los ingenios y todo lo que tenga que ver con trabajo duro,
incluso el estado usa su fuerza de trabajo para la construcción
de zanjas y cloacas.
si la familia se va de vacaciones dejan un haitiano cuidando la casa.
Están en todas partes porque son de aquí.
Nadie le pregunta si son legales o ilegales:
Venden frutas, jugos, helados, frituras y hasta conchando los he visto,
limpiando el jardín en las casas de losgenerales y de políticos,
así como en las iglesias. Limpian zapatos, piden en los semáforos.
Hay que dejarse de vaina y entender de una ves y por todas
que este es un país siamés, imposible de separarse de su querido hermano,
así que si vienen con enfermedades,
atípicas y endémicas les damos hospitales y medicinas,
si son delincuentes y asesinos pues ahí están nuestros tribunales
para administrarles servicios de justicia y locales carcelarios para que cumplan la pena
si vienen embarazadas, les damos hospitales y medicinas.
Ó somos la parte del frente de la republica de Haití, ó somos un país muy rico,
que nos sobran puestos de trabajo, empleos y dinero.
¿Pero a donde se ha ido la mano de obra desplazada por la mano Haitiana?
ya no estan las zonas francas,
Pues a las yolas hacia Puerto Rico, la cual es más cara que un tiquete aéreo
a cualquier parte del mundo, el destierro,
involuntario hacia países Europeos.
Nuestras muchachas de los campos que venían a hacer el trabajo domestico a las ciudades han tenido que prostituirse dentro y fuera del país para sobre vivir.
No es que esté en contra de la migración, ni de la haitiana,
ni de ninguna otra a la Republica Dominicana,
con lo que no estoy de acuerdo es con la usurpación
de la mano de obra de manera ilegamente descontrolada en este lado de la isla.
Los campesinos ya no echan un día en el campo,
porque pagarle a un haitiano es más beneficioso para el patrón,
trabajan más y cobran menos segun ellos.
Así mucha clase de trabajo que a un dominicano hay que pagarle bien,
a un inmigrante haitiano le pagan una chilata.
Pero ese dinero que los haitianos ganan se va completito para Haití,
ellos no lo gastan aquí,

mientras el dominicano que acostumbraba a hacer ese trabajo queda sin funciones.
Hay que hacerle entender al patrón que el pago para un trabajador en la Republica Dominicana ha de ser el mismo, de acuerdo a su capacidad,
no importa que el trabajador sea Dominicano, Español, Mexicano, o Haitiano,pero esas reglas es el estado quien tiene que ponerlas claras, no con represión contra los inmigrantes, no con dejadez como hasta ahora se ha venido haciendo.
Mientras tanto este artículo lo escribo con el llanto de los obreros de la construcción,
los cuales han sido desplazados en más de un cincuenta por ciento y
aun así el estado no tiene ni construye una politica clara al respecto.
Victor Suarez

RAFAEL SANTOS: EL MASTRO


Siempre: los estudiantes le llaman profesor
a aquel que lleva como instrumento de trabajo
una tiza y un borrador, a aquel que cada día está de pie frente a ellos,
con el claro propósito de dar clases,
pero a aquel, el cual además de dar las clases
enseña a aprender y se entrega por completo a la instrucción
como un sacerdocio, los sabios parroquianos le llaman maestro.

Así especifico yo a Rafael Santos, maestro que da de si hasta lo inverosímil
para hacer de los educandos, hombres y mujeres diestros para el
futuro.
Cada maña con el alba, sale en su yamaha 125 hacia la escuela de los ranchitos, (o el ranchito)
escuela que hoy dirige, siempre con el sueño de dar más que lo que ayer pudo haber dado.

Todo lo tiene presente y todo quiere enseñarles a sus estudiantes,
disciplina, comportamiento, higiene y sobre todo,
poner en sus almas el amor por los demás.
Y no solo es líder entre los alumnos, si no que por ese afán constante por entregar
sus conocimientos en cualquier situación en la que se encuentre,
es guía entre los comunitarios y compañeros de trabajo.
Licenciado en educación y veintitrés años en servicio,
cualquiera diría que son suficientes para ganarse el sobre nombre de diestro;
sin embargo tal licenciatura y todos esos años en el magisterio, no son más que un complemento
a su sapiencia, porque aquella gracia,
aquel amor por el trabajo de la enseñanza, corre por su sangre,
se impregna en su piel y cada palabra que de su boca sale, es una ilustración permanente.
Visité la casa del maestro, en la Sabana de Luperón, provincia, Puerto Plata
y la placidez de su modesto hogar me fascinó. Una familia típica de la Republica Dominicana
llena de amor y de respeto, casado con Alejandrina Ramos, maestra también,
con la cual han procreado cuatro hijo, Su foto de graduación cuelga de la pared
al lado de la foto familiar, su pequeña biblioteca en la sala,
donde los libros de historia y ortografía predominan.
Como buen anfitrión, la mesa tenia moro de gandules, carnes de cerdo,
de guinea y de pavo, así como ensaladas verdes y de papas, "o rusa",
coca cola, habichuela con dulce y café. Toda la familia reunida a la mesa degustando,
de aquel manjar que él y su esposa habían preparado.
La comunidad educativa se enorgullece de ciudadanos así,
de padres de familias así,
de maestros así, porque viven claro del papel que debe desempeñar
antes la sociedad y la comunidad en la cual vive y a la cual le sirve.।



VICTOR SUAREZ

Un viaje a Massachussets



Viajar hoy día es cosa del demonio. Cuanto trabajo se sale a pasar y en mi lugar uno se siento ultrajado, manipulado, deshumanizado, avergonzado, todo en nombre de la seguridad aérea. Antes de salir de la casa, ya vamos pensando en que ropa vestir que sea cómoda y fácil de quitar ante los oficiales y maquinas de evidencias.

"Pase la maleta por aduana." Te abren la maleta y te sacan hasta los pantaloncillos buscando algún vegetal vivo, después de haberla arreglarla tan bien en la casa, ya está más desarreglada que un nido de paloma, luego en el chequeo de ticket y legalidad de su visa, residencia, o ciudadanía, te entregan el ticket advirtiéndote que debes entrar lo mas rápido posible por la salida tres. El policía de la primera puerta chequea tus documentos, sin una sonrisa, sin nada, y te da paso, claro si ese eres tu que está en la foto, luego para pasar a migración debes quitarte los zapatos, la correa, la chaqueta, el celular, las llaves, tu bulto de mano, la cartera, y si suena la maquina todos los ojos miran hacia ti. Al pasar allí hay mil guardias de seguridad mirando con el rabillo del ojo con recelos, y viendo la cara de delincuente, de traficante y de mula en todo aquel que por allí pasa. Ante tales miradas uno comienza a vestirse de nuevo, sudado, con los nervios de puntas y acelerado para llegar a tiempo a la salida tres. Llegas a las casillas de migración y los oficiales te preguntan por las cosas que ya están escritas en el formulario, pero hay que responder y de buenas ganas," hacia donde va usted"? A Boston, "que trabaja"? Trabajo independiente, "cual es su profesión"? soy abogado, okay. Entonces la zona franca que de franca no tiene nada, las cosas son más caras que en las mejores plazas del mundo.

A la entrada del avión otro grupo de personas están allí chequeando su pasaporte haber si usted se parece al que está en la foto, a la vez que te preguntan cuanto dinero llevas hacia los Estados Unidos. Entras al avión con el ticket en la mano y la azafata te dice donde debes sentarte, de prisa que estamos a punto de partir. Despega la aeronave todo mundo en silencio; tres horas y media, dos mil seis cientos sesenta y seis kilómetros a Boston, treinta y siete mil pie de altura sobre el mar, la cena, la película, pague dos dólares por el audífono si quieres verla y escucharla. (Favor mantenerse en sus asientos, estamos pasando por una zona de turbulencia)

Comienza el descenso al aeropuerto Logan de la ciudad de Boston, el vuelo fue bueno, el aterrizaje magnifico, gracias por volar en American Airland, bienvenidos a los Estados Unidos de Norte América, pueden encender sus celulares. Entramos a migración y volvemos a ser sospechosos, desde que entras al pasillo hacia migración. Ciudadanos por la casilla uno, residentes y pasajeros con visas de turistas casilla dos, cuantos tiempo se quedará en los estados unidos? Quince días, ponga las huellas dactilares aquí, te sellan el pasaporte, "siga", entonces en aduana; perros olfateando en tus pies, policías encubiertos que te miran con ojeriza, si estás mal vestido, te paran porque pareces ilegal, si estás bien vestido te paran, porque puedes ser narcotraficante, si eres dominicano estás fichado como personas que se meten en todo fácilmente, "puede ser una mula", si tienes tipo de medio oriente eres sospechoso de terrorista. Otra vez tu maleta es revisada por oficiales de aduana y otra vez los calzoncillos salen a fulgurar sobre el caunter," llevas frutas, salami, quesos, trae dinero"? y etcétera. Luego te dan paso, y ya estás exhausto, sales a la sala de espera, y allí está tu familiar esperándote que parece que fue obligado a buscarte, "le traje un abrigo, hace frío póngaselo primo".

Quince días en Boston y la gente de la casa solo los ve por las noches, llegan cansados de trabajar, comen y se acuestan; tu solo miras por la ventana, la nieve cubre el pavimento, la frisa sopla fría y fuerte. Un domingo te sacan a cenar para que no pienses que tu familia aquí en U.S.A. está mal. Compras algunas cosas, algunos regalitos, te regalan algunos panchos, y te sueldan un par de maletas para los viejos en Santo Domingo. El día de tu partida te llevan huyendo al aeropuerto porque hay que volver rápido para el trabajo. Otra vez se inicia la odisea, "quítate los zapatos, la correa, el abrigo, la cartera, el bulto de mano, cuanto dinero lleva", y comienza uno a atenuarse poco a poco y lo que eran unas vacaciones en los Estados Unidos, terminan en una frustración.

Favor permanecer sentados y con el cinturón abrochado que en cinco minutos estaremos aterrizando en el aeropuerto Internacional de las América.

Un aplauso al aterrizar, ya estamos en Santo Domingo, el calor de nuevo, se invierten las cosas, todos te miran al recoger las maletas casi preguntándote que si le trajiste algo, todos te lo dicen con la mirada desde el oficial de migración hasta el maletero, luego una pasarela, de ambos lados gente mirando, esperando familiares y murmurando tu llegada y tu paso a través de la pasadera. Pero ese es mi Santo Domingo, aquí me siento bien, sin presión ni depresión, puedo ir donde quiera y cuando quiera, puedo hacer cuanto quiera, soy un Dominicano, sin tacha y sin mancha, aquí soy silvestre, aquí soy libre.



Autor:
Victor Suarez

SANGRA LA TIERRA, POR VICTOR SUAREZ, REP. DOMINICANA

SANGRA LA TIERRA
Por Víctor Suárez

La tierra herida
herida la tierra
bajo el costado azul del occidente
sangra y se desangra,
sangre negra de su vena lacerada, vital energía,
se vierte y llora la tierra
y lloran los pájaros circundantes,
llora la fauna,
llora el golfo
y como llora la flora, yo también lloro.

La mano inicua,
tras los mezquinos intereses
empujan la daga hasta el corazón mismo del planeta,
Sin importarles que pare de repente
en mitad de la nada, sin concernir
que se detenga la vida
y estalle en mil pedazos nuestro mundo.

No les importa tu dolor, amada tierra
ni el de los otros, ni el mío, si no, el saqueo de tu vientre
desgarrado.


Sangra la tierra,
herida de muerte,
en su agonía el asombro
de los que no sabemos
como entregarnos por entero,
hasta elevarte más allá de la galaxia,
donde no nazcan corazones sedientos de poder y de fortuna,
ni espíritus repletos de barbarie e ignorancia.

Sangra la tierra
la madre grande,
la vieja madre,
llora y se desnivela,
el riesgo a todos atañe,
poderosos y miserables,
todos pagaremos la misma culpa,
unos el pecado de la indolencia y otros el del descuido
y aquellos que lloramos al verte morir
al menos palmaremos conformes
de saber que sucumbimos acunándote,
queriendo salvarte de los irracionales,
de los que vestidos de trajes y corbatas, en oficinas de lujo en Wall Street
quieren hacernos creer que son civilizados.
La tierra sangra, la tierra llora
y yo, lloro y muero con ella.

Víctor Suárez
Poeta de la Rep. Dominicana